

Edimburgo, Escocia
Edimburgo es la capital y un condado de Escocia (Reino Unido). Es la segunda ciudad más grande de Escocia tras Glasgow.
Ubicada en la costa este de Escocia, a orillas del fiordo del río Forth y en la autoridad unitaria local de la Ciudad de Edimburgo, es la capital de Escocia desde 1437 y sede del gobierno escocés. Fue uno de los centros más importantes de educación y cultura durante la Ilustración gracias a la Universidad de Edimburgo. Sus distritos The Old Town (ciudad antigua) y The New Town (ciudad nueva) fueron designados Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1995. Según el censo de 2017 tiene un población total de 513 210 habitantes.

LA HISTORIA
Capital de Escocia, Edimburgo es la segunda ciudad más visitada en el Reino Unido después de Londres. Este honor se lo debe al encanto de sus calles y edificios, muchos de ellos de estilo medieval, que le confieren a la ciudad una magia especial. La ciudad vieja es una de las dos grandes áreas en las que se divide la capital escocesa, siendo la otra de construcción mucho más reciente, hecho que se aprecia claramente al visitar ambas zonas. En la ciudad vieja, el impresionante Castillo de Edimburgo es el principal atractivo donde el visitante quedará fascinado por su construcción, hecha con piedra de origen volcánico sacada de la misma colina en la que se asienta la fortificación.
El castillo, la más famosa estampa de la ciudad, pone inicio (o fin) a un paseo por el Edimburgo más ineludible: la Royal Mile, una calle que atraviesa el casco antiguo y brinda al visitante algunos de los puntos más interesantes de la ciudad y muchos de sus rincones más bellos. Bajando la colina se encuentra la iglesia de Saint John, seguida de la Catedral de Saint Giles, del siglo XII, y límite entre la parte antigua y la moderna, donde se puede disfrutar de los secretos de Mary King’s Close, el The People’s Story Museum o la residencia real, junto al Parlamento escocés. En definitiva, pasear entre cervecerías, galerías, museos, jardines, vestigios medievales y otros encantos de la ciudad durante 1,8 km.
Edimburgo no es solo un lugar idílico para visitar en otoño, cuando los colores y la lluvia inundan la atmósfera de ese sentimiento de misterio tan literario. La ciudad se llena de vida en verano, sobre todo en agosto, un mes perfecto para disfrutar de su gran oferta cultural. Actividades al aire libre, artísticas, musicales, en vivo y con gente de distintos lugares del mundo, una excusa perfecta para hacer una visita a Edimburgo. La Royal Mile cobra más vida que nunca con actuaciones, el castillo despliega ante él el Military Tatoo, un colorido desfile militar, el Festival Internacional del Libro de Edimburgo reúne a amantes de la literatura y el Mela Festival acoge propuestas artísticas y gastronómicas de todo el mundo.
Aunque el Edinburgh International Festival es uno de los más famosos, son muchos los eventos que tienen lugar durante el mes de agosto. Aun así, la fiesta no es el único atractivo del verano en la ciudad. El buen tiempo invita a visitarla para descubrir las increíbles vistas de Arthur Seat y sus agradables senderos, apuntarse a ver un espectáculo de magia o una ruta nocturna por los misterios de una ciudad que guarda secretos lúgubres en lugares como la iglesia de Greyfriars Kirkyard o los mausoleos de Canongate, y descubrir dónde encontró Robert Louis Stevenson la inspiración para escribir sobre el famoso dúo del Doctor Jekyll y Mr. Hyde.
Sin embargo, cualquier época es buena para encontrar planes alternativos a los usuales dentro y cerca de la ciudad de Edimburgo. El barrio de Leith es uno de los mejores ejemplos, un lugar donde el arte y los comercios se entremezclan con locales gourmet donde disfrutar de estrellas Michelin. Espacios musicales en edificios singulares donde aprender a bailar el ceilidh, pequeñas playas donde descubrir otros paisajes escoceses, cruzar los puentes que llevan a la región de Fife o descubrir pequeñas villas llenas de encanto donde las flores y las bellas casas de piedra se enmarcan entre senderos y rincones artísticos. - Fuente: https://viajes.nationalgeographic.com.es/c/edimburgo
Museos y bibliotecas
Edimburgo alberga gran cantidad de museos y bibliotecas, muchos de los cuales son instituciones nacionales. Entre ellos se incluyen la Biblioteca Nacional de Escocia, el Museo de Escocia, el Museo de Edimburgo, el Museo Real, la Galería Nacional de Escocia, con obras de Botticelli, Rafael, Tiziano, Velázquez, Watteau, Paul Gauguin. Otros museos importantes en la ciudad son la Real Academia Escocesa, la Galería Nacional Escocesa de Retratos, la Galería Nacional Escocesa de Arte Moderno, la Dean Gallery, el Museo Nacional de Guerra de Escocia, el Museo de la infancia y el Real Jardín Botánico. La mayoría de los museos de la ciudad son gratuitos.
En Edimburgo se encuentra también la Biblioteca Nacional de Escocia (National Library of Scotland) que es la biblioteca más importante de Escocia y una de las más grandes del Reino Unido.
Áreas de la ciudad
El histórico centro de Edimburgo está dividido en dos grandes áreas por los Princes Street Gardens. Hacia el sur el panorama está dominado por el Castillo de Edimburgo, asentado en el extinguido tapón volcánico que es Castle Rock, y la larga franja que es Old Town encaminándose por su borde. Hacia el norte se encuentra Princes Street (“Calle de los Príncipes”) y la New Town. Los jardines fueron hechos en 1816 en lo que había sido el pantano Nor' Loch.
Hacia el oeste del castillo se encuentra el distrito financiero, que alberga edificios bancarios y de aseguradoras. Probablemente el edificio más cautivante, con su gran edificio circular hecho en arenisca, es el Centro Internacional de Conferencias de Edimburgo, o Edinburgh International Conference Centre.
La ciudad vieja y la ciudad nueva de Edimburgo fueron declaradas Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en el año 1995
























